A inicios del año en curso la empresa estadounidense Talos como parte de su estrategia para mejora como empresa privada y como figura fundamental que lidero los trabajos para el descubrimiento del campo Zama en 2017, que se considera uno de los mayores hallazgos petroleros a manos de empresas privadas, decidió vender el 49% de las acciones de su filial en México a Grupo Carso, de quien es dueño Carlos Slim.
Talos por dicha operación recibió una cantidad aproximada de $74.8 millones de dólares al cierre de operación y recibirá $49.9 millones ante la primera producción de petróleo que se realice, y mantiene un 17.4%de interés en el campo marino Zama que comparte con la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), la cual opera el yacimiento. Pemex y el consorcio privado encabezado por Talos gastaran $9,000 millones de dólares para impulsar el desarrollo del campo, el cual se estima que comenzara su producción durante el 2025 y alcanzara su pico de 180.000 barriles diarios de petróleo en 2029, esto según datos de Arturo Solís para la revista Bloomberg Linea.
Este mega yacimiento ha sido también uno de los motivos de disputa del sector privado y el gobierno, la discusión sobre la operación del campo, que fue el primero descubierto por privados tras las rondas petroleras se extendió por más de dos años, pues Talos y Pemex se disputaban la titularidad de su operación, que finalmente quedó en manos de la estatal Petróleos Mexicanos.