La producción de petróleo crudo de Petróleos Mexicanos (Pemex) disminuyó un 2.21% en enero comparado con el mismo mes de 2023, reflejando una tendencia decreciente que llevó a la empresa a registrar su nivel más bajo de producción en los últimos 44 años, según datos de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
Esta caída se inscribe dentro de un contexto de dificultades prolongadas para incrementar la producción, evidenciadas por la incapacidad de superar la barrera de los 1.71 millones de barriles diarios durante doce meses. A pesar de los esfuerzos por aumentar los niveles de extracción, incluyendo la adición de condensados de campos prioritarios, la producción combinada de hidrocarburos líquidos no ha logrado recuperar las cifras previas a los recortes presupuestales y los acuerdos de reducción con la OPEP+.
Los desafíos incluyen el declive en campos maduros, inversión insuficiente en exploración y producción, y accidentes frecuentes, lo que ha impedido a Pemex alcanzar sus metas de extracción establecidas al inicio del sexenio.
